Chocolates Kina: Una historia de sueños, desafíos y un dulce legado

La marca, reconocida por su compromiso con la calidad y la sostenibilidad, nació de una experiencia única que marcó la vida de su fundador: su trabajo como director de un museo de chocolates en el extranjero.

Esa vivencia no solo amplió su conocimiento sobre el arte del chocolate, sino que también sembró en Óscar la semilla de una idea ambiciosa: crear una tienda de chocolates propia en su tierra natal. Hoy, esa visión es una realidad que no solo endulza paladares, sino que también conecta culturas y apoya a comunidades.

Chocolates Kina no sería lo que es sin la colaboración de agricultores latinoamericanos de países como Colombia, Venezuela y México. Óscar trabaja codo a codo con ellos, asegurándose de que cada grano de cacao utilizado provenga de cultivos éticos y sostenibles. Este enfoque no solo garantiza un producto de calidad, sino que también promueve prácticas responsables que benefician a las comunidades productoras.

Además, Óscar comparte su pasión y conocimiento a través de talleres que organiza tanto para adultos como para niños. Estos cursos brindan la oportunidad de aprender, de su propia mano, el arte de crear un chocolate, desde el grano de cacao hasta el producto final.

Durante una conversación reciente, Óscar dejó un mensaje inspirador para los emprendedores: “Cuenten una historia única y luchen por sus sueños”. Su propia trayectoria, llena de desafíos y logros, es un ejemplo vivo de cómo la determinación y la pasión pueden convertir una idea en un legado.

Chocolates Kina es más que una tienda; es un puente entre continentes, una celebración de la cultura del cacao y un homenaje a los sueños cumplidos.